Estados Unidos buscará deportaciones rápidas de familias migrantes que viajan con niños

Por Camilo Montoya-Galvez – Julio 27, 2021

Si los migrantes colocados en los procedimientos acelerados expresan temor de ser lastimados en sus países de origen, se supone que deben ser entrevistados por oficiales de asilo de EE. UU. Si pasan esas entrevistas, los migrantes pueden presentar un caso completo de asilo en un tribunal de inmigración.

Las deportaciones aceleradas, creadas por una ley de la era Clinton, han sido utilizadas por administraciones republicanas y demócratas como una forma de disuadir los cruces fronterizos no autorizados.

"Intentar cruzar a los Estados Unidos entre los puertos de entrada, o eludir la inspección en los puertos de entrada, es la forma incorrecta de llegar a los Estados Unidos", dijo el DHS en su anuncio. "Estos actos son peligrosos y pueden tener consecuencias migratorias a largo plazo para las personas que intentan hacerlo".

Históricamente, la sociedad civil y sus defensores han criticado la expulsión acelerada, que argumentan que la práctica prohíbe a los solicitantes de asilo consultar con abogados en los EE. UU. Y conduce al regreso rápido de personas que podrían enfrentar peligro en sus países de origen. "El sistema de deportación acelerada conduce habitualmente a errores y no es un sistema que no deba utilizarse cuando la vida de las personas está en juego", dijo a CBS News Lee Gelernt, abogado de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles. "Estamos extremadamente decepcionados de que la administración Biden esté considerando colocar a las familias vulnerables que buscan asilo en un sistema que carece de las protecciones básicas del debido proceso".

No está claro si la administración de Biden buscará detener a las familias mientras los oficiales de asilo determinan si se les debe permitir solicitar protección estadounidense. Hasta la fecha, ha estado liberando a la mayoría de las familias migrantes con avisos para comparecer en un tribunal de inmigración y ha descontinuado la detención familiar a largo plazo, utilizando hoteles para retener brevemente a padres e hijos.

El anuncio del lunes se produce cuando ha aumentado el número de familias migrantes que ingresan a la custodia fronteriza de EE. UU. En junio, los agentes estadounidenses a lo largo de la frontera sur se encontraron con casi 56.000 padres e hijos que viajaban en familia, un aumento del 25% con respecto a mayo.